Tiene una superficie de 24,5 hectáreas. Fue un regalo de la ciudad de Santander al rey Alfonso XIII, que lo utilizó como residencia de veraneo entre 1912 y 1929. En la actualidad la península es un parque público abierto durante el día.
Tiene una superficie de 24,5 hectáreas. Fue un regalo de la ciudad de Santander al rey Alfonso XIII, que lo utilizó como residencia de veraneo entre 1912 y 1929. En la actualidad la península es un parque público abierto durante el día.